domingo, 28 de abril de 2013

Satya



Satya es el segundo Yama; significa veraz, honesto o virtuoso. En el sentido de ser sinceros con los demás y con nosotros mismos, no engañar ni auto engañarnos. Conducirnos en la vida con veracidad.


Significa veracidad en todo sentido en la vida diaria.
Verdad de pensamiento, palabra y comunicación. La verdad y su expresión -la veracidad- combinan sinceridad y autenticidad en la comunicación adecuada por medio de lenguaje, escritos, gestos y acciones.
No solamente se hiere a los demás con palabras groseras o con finas y artísticas ironías, sino también con el tono de voz, con el acento inarmónico y arrítmico. Nunca debemos condenar a nadie con la palabra porque jamás se debe juzgar a nadie.
La maledicencia, la mentira, el chisme y la calumnia, han llenado el mundo de dolor y de amargura. Además, es necesario saber que la crítica que vertamos sobre una persona se vuelve contra nosotros mismos
¡Es tan incorrecto hablar cuando se debe callar como callar cuando se debe hablar!
Hay silencios delictuosos, hay palabras infames. Se debe calcular con nobleza el resultado de las palabras habladas, pues muchas veces se hiere a otros con las palabras, en forma inconsciente. 

si queremos adentrarnos en el terreno de la meditación debemos cuidar todos estos aspectos que muchas veces pasan desapercibidos. A menudo perdemos mucho tiempo en charlas superficiales, que tienen como base, algunas veces, la vanidad, otras el orgullo, etc., que conducen a la agitación mental.
Es obvio que si durante el día la charla ha sido excesiva y negativa, ya sea ésta exterior o interior, la práctica de la meditación resultará un auténtico fracaso.
No mentir, ser impecable con las palabras; la palabra puede curar o matar. Todo lo que digamos queda suspendido en el cosmos y nos vuelve como karma. Exagerar, pretender, distorsionar, manipular o mentir es contra nuestra pura naturaleza y contra satya.
Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que dice.
Satya esta íntimamente ligado al callar, con este poema podemos descubrirlo


CALLAR Y HABLAR

Callar sobre uno mismo...
es HUMILDAD.
Callar sobre los defectos de otros...
es CARIDAD.
Callar cuando se está sufriendo...
es HEROISMO.
Callar cuando otro habla...
es DELICADEZA.
Callar cuando no hay necesidad de hablar...
es PRUDENCIA.
Callar cuando Dios nos habla al corazón...
es SILENCIO.
Callar ante el misterio que no entendemos...
es SABIDURÍA.
Callar ante el sufrimiento ajeno...
es COBARDÍA.
Callar ante la injusticia...
es FLAQUEZA.
Hablar de uno mismo...
es VANIDAD.
Hablar debiendo callar...
es NECEDAD.
Pero...
Hablar oportunamente...
es ACIERTO.
Hablar ante una injusticia...
es VALENTÍA.
Hablar para defender...
es COMPASIÓN.
Hablar con sinceridad...
es RECTITUD.
Hablar para rectificar...
es UN DEBER.
Aprendamos antes a callar para poder
hablar con acierto y tino...
Porque si la PALABRA es PLATA
el SILENCIO es ORO.

jueves, 25 de abril de 2013

EcoJoven



Una oferta para jovenes que buscan algo mas que divertirse, otras alternativas, otras personas afines a ellos, con mas creatividad en las actividades de ocio y  valentia para afrontar el futuro con confianza en sus propias posibilidades y una sonrisa en el corazon.
 
Se llama Ecojoven, porque pretende equilibrar el " dar con el recibir" y van a canalizar su generosidad, colaborando una hora diaria, con el huerto ecológico, pero también se va a afrontar la propia ecología personal, a traves de la exploración de todo su potencial, mediante un trabajo de coaching emocional, combinado con espacios naturales y tiempos libres para la tertulia.  Se potenciara , no sólo dinámicas de autoconocimiento , sino de " conocimiento de los otros " y por supuesto no faltarán tiempos de lúdicos de ocio divertido , donde ellos mismos prepararan fiestas por la noche ,  alguna excursión, baños refrescantes en la piscina o los lagos de alrededor.

viernes, 5 de abril de 2013

Yoga Nidra



Yoga Nidra es en realidad una práctica avanzada, una forma avanzada de Shuddi que permite limpiar el subconsciente y explorarlo, ofreciendo un acceso directo a él.

Con Yoga Nidra podemos experimentar también el estado de turiya, el cuarto estado de consciencia, que da origen a los tres estados ordinarios: vigilia, ensoñación y dormir profundo.

http://evidasana.com/wp/wp-content/uploads/2012/01/Yoga_Nidra_photo.jpgEl estado de turiya equivale al estado de samadhi. El logro del Yoga Nidra es casi tan difícil como lograr el estado de samadhi. La práctica de Yoga Nidra es una excelente preparación para conseguir este estado.

El siguiente texto de Swami Satyananda está extraído y traducido de su libro "Yoga Nidra". Explica de forma científica cómo funciona la técnica de Yoga Nidra:


“Los estados de consciencia

Yoguis y fisiólogos reconocen por igual tres estados diferentes de la consciencia humana. Son los estados de vigilia, de soñar y del dormir profundo sin sueños. Cada uno de estos estados de consciencia ha sido correlacionado con distinto patrones de actividad eléctrica del cerebro.

- En el estado de vigilia, en el que la mente consciente está ocupada con el entorno externo a través de los canales de los sentidos, predominan en el cerebro las ondas beta (13-20 ciclos por segundo).

- En el estado de soñar la mente subconsciente se vuelve predominante, y se expresan activamente los deseos reprimidos, los miedos y las impresiones profundamente arraigadas en la mente. Aquí predominan las ondas theta (4-7 c.p.s.).

- En el estado de dormir profundo sin sueños cesa toda actividad y fluctuación mental, la mente y el cuerpo están paralizados. La consciencia y el prana (energía vital) se retiran del cuerpo y de la mente. Se activan entonces las ondas delta (0-4 c.p.s.).


El estado hipnagógico

Entre los estados de vigilia y de soñar reside una franja de consciencia que los psicólogos han llamado “estado hipnagógico”. Este estado transitorio raramente dura más de 3 a 5 minutos, y se caracteriza por las ondas alfa (7-12 c.p.s.). Va acompañado de una relajación progresiva y de una liberación de las tensiones musculares del cuerpo, y de una pérdida de la consciencia del entorno exterior, conforme el estado de vigilia se va disolviendo en el estado de soñar.

El Yoga Nidra se da en este umbral entre la consciencia de los sentidos y la consciencia del sueño. Para entrar en él se aprende a extender la duración del corto estado hipnagógico que precede al sueño normal. En el Yoga Nidra aislamos el cerebro y nos introvertimos, mientas mantenemos un grado de consciencia externa.

Durante la práctica de Yoga Nidra se alternan periodos de predominio de ondas alfa con otros de predominio de ondas beta y theta. Esto significa que la consciencia se equilibra en la frontera entre vigilia y sueño durante un periodo extendido, fluctuando entre la introversión y la extroversión. Al permanecer consciente y alerta en el estado alfa entre estos dos se obtiene una experiencia de total relajación, que es no sólo más beneficiosa que el sueño convencional, sino también un portal para un estado superior de consciencia.


El descenso en el sueño

En el proceso del sueño, la persona normal desciende su patrón cerebral de beta a theta, y finalmente a delta; la consciencia pasa desde la vigilia, a soñar y a dormir profundo. En el Yoga Nidra, en cambio, el proceso es diferente. El periodo de actividad de ondas alfa es aquí mucho más extenso, por lo que se promueve un estado mucho más relajado de sueño.

Muchas personas duermen sin liberar previamente las tensiones musculares, mentales y emocionales, al pasar de las ondas beta hacia las delta sin un estado de relajación predominante alfa entre ambas. Por eso muchas personas están cansadas por la mañana al despertar. La relajación profunda, incluso en el sueño, sólo sucede cuando las ondas alfa se vuelven intensas.

La diferencia entre el sueño ordinario y el Yoga Nidra está en que en este último se desarrolla una total relajación entre los estados de vigilia y de dormir profundo, promoviendo un prolongado estado de relajación alfa entre ambos. Es por ello que la cualidad del descanso creado por el Yoga Nidra es tan beneficiosa y refrescante para el cuerpo y la mente.


Vislumbres de la mente total

La mayoría de las personas pierden las consciencia apenas entran en el sueño. Sin embargo, es posible extender esta importante fase de transición, preservando el hilo de la consciencia, lo que nos permite experimentar el sueño con nuestra consciencia de vigilia intacta.

El resultado final del Yoga Nidra es la armonía total y la integración entre todos los niveles de nuestra consciencia. El que domina esta práctica puede trascender los tres estados de consciencia, entrando en un cuarto estado unitivo, más allá de la consciencia individual.

Para la mayoría de las personas los contenidos del estado de sueño y de dormir sin sueños son vislumbrados sólo ocasionalmente mediante un recuerdo de un sueño importante. Como resultado, el hombre ordinario vive sólo en el ámbito restringido de la mente de vigilia, sin saber de sus necesidades y capacidades más profundas. Como su consciencia está fragmentada, es incapaz de sintonizar con los recursos más profundos dentro de sí, incapaz de comprender todos los niveles de consciencia. De esta forma es incapaz de aceptarse y de vivir armoniosamente consigo mismo, ¿cómo entonces podemos estar en paz con los demás?

A través del Yoga Nidra podemos iluminar, explorar y utilizar la casa del tesoro, nuestra propia consciencia, para enriquecer nuestra propia vida.


Despertar cerebral

Los investigadores proponen ahora que si la consciencia del testigo subyacente puede ser mantenida durante las experiencias del sueño y del dormir sin sueños, sucede un cambio evolutivo fundamental en el sistema nervioso central y en sus actividades. Este cambio es acompañado por la experiencia de un diferenciado cuarto estado de consciencia, en el que los estados sutiles de percepción del sueño (incluyendo las dimensiones astral, psíquicas y causales) son experimentados a la vez que el estado despierto normal.

Este cuarto estado superconsciente, que incluye la consciencia simultánea de los estado de vigilia, sueño y dormir sin sueños pero que no es afectado por ellos, ha sido descrito en textos yóguicos durante miles de años, y se conoce como “turiya”. Sin embargo, era desconocido hasta hace poco para los investigadores, hasta que ha sido demostrado en los laboratorios.

Este estado se manifiesta neuro-fisiológicamente como una actividad reforzada del córtex superior – conocido como “cerebro consciente”- junto con un mayor control y reducción de actividad de los centros límbicos del “cerebro emocional”. Esto significa una evolución de la personalidad hacia mayores niveles de consciencia interna y externa, con una disminución de la reacción emocional.

Este cuarto estado fue verificado en laboratorio por primera vez en 1977 en la Fundación Menninger en Kansas, Estados Unidos, bajo la dirección del doctor Elmer Green. La actividad cerebral del yogui Swami Rama fue monitoreada conforme entraba a voluntad en los diferentes estados de consciencia, incluyendo el dormir sin sueños, mientras mantenía su consciencia de vigilia en todo momento a través de la práctica de Yoga Nidra. El resultado fue una revelación para la comunidad científica.

La capacidad de permanecer plenamente consciente mientras uno produce ondas cerebrales delta y experimenta el dormir sin sueños es uno de los indicadores del estado superconsciente (turiya). Éste es el estado final del Yoga Nidra en el que las barreras convencionales entre vigilia, sueño y dormir sin sueños son eliminadas, revelando la operación múltiple de las mentes consciente, subconsciente e inconsciente. El resultado es un estado único e iluminado de consciencia, y una personalidad perfectamente integrada y relajada. Los que han alcanzado este estado no sueñan en absoluto. Tienen un estado de ser que no se altera. La vigilia y el sueño son similares para ellos, porque están continuamente experimentando el cuarto estado espiritual de superconsciencia. En el pasado este estado fue siempre considerado en términos místicos y religiosos, pero ahora ha sido reconocido y definido como una realidad fisiológica.”

Swami Satyananada, Yoga Nidra

lunes, 1 de abril de 2013

AHIMSA No violencia



Es el Yama por excelencia, ya que a partir de el nacen todos los demás
Si el objetivo del yoga es la libertad, esa libertad sólo puede experimentarse realmente desde el amor a todas las criaturas

No-violencia, benevolencia, amabilidad, consideración, compasión hacia todos los seres vivos, por uno mismo y por los demás, en especial los indefensos, los inocentes, los que están en apuros o en una situación peor que la nuestra; no matar, hacer el menor daño posible y el mayor bien posible. Paciencia y perdón.

No inflingir dolor en otros, por medio de la acción, las palabras o el pensamiento.



Ser consciente de cómo nos tratamos a nosotros mismos, a los otros y al entorno. Se refiere a no ejercer violencia sobre los demás, sobre lo que nos rodea, y sobre nosotros mismos. Entendiendo como violencia no sólo a la violencia física, sino también a la violencia verbal, psicológica, emocional. Hay que relacionarse con todo y en todos los sentidos con extremo cuidado. La consideración hacia todos los seres vivos incluye también a los animales, a las plantas, al medio en el que y del que vivimos. Nos dañamos a nosotros mismos cuando tratamos sin respeto a las demás personas y al medio ambiente.

Ahimsa requiere introspección para reemplazar los pensamientos y acciones negativas y destructivas por otras positivas y constructivas, la no violencia es un estado mental; es esencialmente una actitud interior, no sólo algo externo.

La intolerancia, la descortesía, el agravio verbal, un pensamiento de odio son formas de violencia. También el abuso es violencia, por civilizado que sea. Y la falta de respeto, y la exclusión, el rechazo o el menosprecio de los débiles o diferentes, el imponer nuestros deseos, nuestras ideas y nuestra manera de ser y el mirar para otro lado ante la violencia ejercida a otros. Todas estas formas de violencia implican una gran energía que debemos canalizar en sentido contrario y poner al servicio de un camino espiritual.

Si practicas Ahimsa, debes abandonar los insultos, los reproches, el criticismo y la agresión. Nunca debes replicar ni desear ofender a nadie aún ante la mayor provocación. No debes tener malos pensamientos hacia nadie. No debes tener ira. No debes maldecir.

El camino hacia Ahimsa pasa por investigar que produce nuestros deseos de violencia, que nos hace excluir a los demás de nuestro cuidado y afecto.

La consideración  hacia todos los seres vivos incluye también a los animales, a las plantas, al medio en el que vivimos.

El camino hacia Ahimsa es largo y sutil, pero una vez comprendido que lo que hacemos a los demás nos lo hacemos a os otros mismos, resulta gratificante dar el primer paso.

Yama debe entenderse como cuidar que todo lo que entra  en nuestro cuerpo sea puro.
Los que practican yoga van sintiendo la necesidad de tomar la energía directamente de su fuente y aunque no se lo propongan van sintiendo la necesidad de ser vegetarianos. Cada vez el cuerpo va pidiendo una alimentación con más energía y con menos magnetismo animal, que nos ayude a nuestro desarrollo de seres pensantes y espirituales.

Si comemos más de lo que necesitamos hacemos daño a nuestro cuerpo. Hay que tomar lo que nuestro cuerpo necesita. No ingerir drogas, tóxicos

Hacer la vida difícil es una falta de respeto a la vida